Siguiendo con el contenido que puede analizarse de la serie Black Mirror, esta vez le toca a San Junípero. Si todavía no viste este capítulo, te advierto que va a haber spoilers.
San Junípero es un entorno de realidad virtual al que pueden acceder “turistas” -ancianos y enfermos- y “fulltimers” -personas ya fallecidas-. Estos últimos pueden “vivir” allí eternamente. Mientras que los “turistas” acceden a través de un período de prueba, una demo.
San Junípero es una especie de terapia de inmersión nostálgica, con una tecnología que sumerge a las personas en un mundo de recuerdos, de épocas doradas.
San Junípero es inmortalidad. Su lema es que nadie tiene que morir. Se trata de finales que no llegan nunca, tal como sucede con las protagonistas de este capítulo: Kelly y Yorkie, quienes dejan atrás sus propias muertes sin tener que padecerlas ni aceptarlas, negando su realidad.
Kelly y Yorkie estuvieron dispuestas a vivir para siempre e inmediatamente en un lugar donde todo es joda y no existe el dolor, literalmente hablando, ya que puede observarse una escena en la que Kelly rompe un espejo con su puño, y no sangra ni le duele, ya que en San Junípero existe la posibilidad de poner los sensores de dolor en 0.
San Junípero en su totalidad es una defensa maníaca, ya que ante las distintas realidades existentes, el objetivo principal es la evitación del dolor, la negación de la realidad, donde rápidamente se repara todo tipo de enfermedad y muerte, mágicamente, sin contacto con el dolor.
Kelly y Yorkie aceptan “vivir” una ilusión a sabiendas de que su vida ya terminó. Encontraron la felicidad en un simulacro, volviéndose la inmortalidad una realidad, “viviendo” una “vida” eterna en San Junípero.
La muerte es un destino inevitable, pero el proceso de desprendimiento y renuncia es burlado en San Junípero, así como también la realidad, que se ha tornado insoportable tanto para Kelly como para Yorkie, y han decidido romper todo vínculo con ella, “viviendo” en una realidad virtual paralela. No están preparadas para afrontar sus muertes y las transformaron en evitables, evadiéndolas. La capacidad para tolerar el dolor de sus propias muertes se encuentra truncado, dado que ellas quieren eludir que dicho dolor exista.
Kelly y Yorkie hicieron a un lado la muerte. La eliminaron de sus vidas. Mataron a la muerte. En lugar de aceptar sus propios duelos, jugaron a ser inmortales, sin tener que decir adiós y negando la realidad que les tocó por suerte, culminando este capítulo con ellas dos en San Junípero conduciendo un auto hacia la inmortalidad.
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